- A pesar de los cientos de millones donados a bienes públicos como hospitales, los miles de millones perdidos a través de fraudes muestran que la criptoindustria está lejos de alcanzar sus objetivos de filantropía.
- La criptoindustria necesita redimirse del crimen orquestado a través de la blockchain y costar a los inversores miles de millones de dólares, especialmente durante el mercado bajista de 2022.
La adopción generalizada de activos digitales ha magnificado significativamente los vicios orquestados por la mayoría de los gobiernos en nombre del alivio. A medida que más gobiernos luchan contra la adopción generalizada de activos digitales, es evidente que el sistema en la sombra quiere que algunas facciones de la sociedad permanezcan en la más absoluta pobreza mientras otras languidecen en el lujo. Sin embargo, los líderes de la criptoindustria han optado por tomar cartas en el asunto para hacer del mundo un hábitat mejor.
Cómo las criptoempresas están cambiando la cara de los bienes públicos
Según las estimaciones, el organismo de las Naciones Unidas necesitaría alrededor del 63 por ciento de la cuota de mercado de Dogecoin (DOGE) para resolver el hambre en el mundo. Sin embargo, la falta de buena voluntad de las naciones participantes para luchar contra el hambre en el mundo, entre otras necesidades humanitarias, ha llevado a algunas regiones del planeta al borde del hambre. Además, no hay forma de que Estados Unidos permita que otras monedas suban frente al dólar con todo su poder nuclear a su disposición.
Como resultado, las empresas de criptomonedas han empezado a aunar esfuerzos para preservar los bienes públicos a cambio de su adopción masiva. La relación simbiótica entre las criptoempresas y los clientes ha permitido la donación de bienes públicos a través de la tecnología blockchain. El ecosistema Stellar Lumens (XLM) lo ha demostrado al participar activamente en la distribución de donaciones a Ucrania, entre otros lugares afectados por catástrofes.
En los últimos acontecimientos, los gigantes de las criptomonedas han formado la Alianza de Bienes Públicos, que incluye a pesos pesados como Protocol Labs y Giveth. El Celo Climate Collective ha prometido hasta 340 millones de dólares para rehabilitar las regiones deforestadas del mundo. En otro caso, Gitcoin, una blockchain y DAO centrada en la filantropía, se ha asociado con el Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia para luchar contra el hambre en el mundo. Del mismo modo, Uniswap y Coinbase han establecido sus respectivas subvenciones destinadas a rehabilitar los bienes públicos y ayudar a satisfacer la alta demanda.
Según el cofundador de Gitcoin, Kyle Weiss, el éxito de los criptoproyectos debería ser recíproco con el bien público para la mejora de la sociedad. Además, la tecnología blockchain ha demostrado su eficacia a la hora de coordinar enormes grupos de personas a través de DAOs sin que una única entidad tenga el poder último.
El éxito consistiría en un ecosistema floreciente de aplicaciones descentralizadas, protocolos, comunidades, DAO, tal vez incluso tokens nativos, que utilicen PGN [redes de bienes públicos]para coordinarse e interactuar, de modo que cualquier interacción que tengan en la cadena -degenerativa o de otro tipo- revierta en la financiación de bienes públicos colectivos», señaló Weiss.
Una visión más amplia
El criptomercado está en condiciones de curar al mundo de la injusticia histórica perpetrada por las superpotencias dominantes. A cambio, el cripto mercado puede utilizarse como herramienta para unir a todas las personas como parte de la raza humana sin divisiones de religión, color o sexo.
