- Ethan Peck insta a Amazon y Microsoft a explorar Bitcoin para combatir la inflación y preservar el valor para los accionistas.
- Las propuestas de los accionistas pueden impulsar la adopción de Bitcoin por parte de las empresas, pero se enfrentan a la resistencia de los gestores de activos y a obstáculos técnicos.
Las empresas estadounidenses se enfrentan a una cuestión apremiante: ¿Deberían los gigantes tecnológicos como Microsoft y Amazon añadir Bitcoin a sus balances? Ethan Peck, director adjunto del Free Enterprise Project, ha contribuido a que este argumento cobre fuerza.
Peck declaró en una reciente entrevista con Anthony Pompliano en su canal de YouTube sus intentos de aportar recomendaciones de los accionistas pidiendo a las grandes empresas que inviertan en Bitcoin. El aliciente es que, al abordar las ineficiencias financieras provocadas por la inflación y los bonos de bajo rendimiento, los beneficios fluirán hacia los propietarios.
El método de Peck parte de un concepto básico pero novedoso: la inflación está borrando involuntariamente el valor de las empresas con grandes saldos de efectivo.
Su idea aboga por el Bitcoin como activo a prueba de deflación para aumentar la preservación y expansión de la riqueza de los accionistas. Pero, ¿por qué las empresas son reacias a adoptar esta visión y cómo funcionan exactamente estos movimientos de accionistas?
Evaluación de Bitcoin: ¿La oportunidad perdida de Microsoft?
Con sus grandes reservas de efectivo, Microsoft era claramente el objetivo de la propuesta inicial de Peck sobre Bitcoin. Las reservas de efectivo más los bonos de bajo rendimiento se quedan cortos frente a la inflación, como describió a Pompliano. De ello se deriva un deterioro constante del valor para el accionista.
Aunque la sugerencia de Peck no exigía una respuesta rápida, instaba a las empresas a considerar la viabilidad de Bitcoin de acuerdo con su plan financiero. «Las empresas tienen una responsabilidad fiduciaria con sus accionistas», dijo Peck. Y añadió:
«Están descuidando su responsabilidad de maximizar los beneficios si no investigan Bitcoin como solución»
Aunque este argumento tiene sentido, Microsoft y otros gigantes corporativos han mostrado resistencia. La idea fue rechazada por el consejo de Microsoft, y sólo el 0,5% de los accionistas la aprobaron.
Pero, como señaló Peck, los gestores de activos institucionales como BlackRock y Vanguard, que poseen bloques significativos de votos, fueron los principales responsables del bajo porcentaje. Sus votos reflejan a veces ideas conservadoras más generales que necesariamente los intereses de los accionistas individuales.
El impulso popular de Peck a favor de Bitcoin en Amazon
Después de Microsoft, Peck dirigió su atención a Amazon, una empresa con una liquidez igualmente enorme. El objetivo sigue siendo motivar a las empresas para que se replanteen sus planes financieros ante la creciente inflación. Más allá de las meras ideas, las iniciativas de Peck apoyan un movimiento de base por el que los inversores minoristas pueden unirse a la campaña para la aceptación de Bitcoin.
Para Peck, el trabajo en equipo es realmente esencial. «El mensaje es más fuerte cuantas más personas presenten propuestas», observó. Aunque sólo tres personas forman su equipo en el Proyecto Empresa Libre, sus esfuerzos combinados en los últimos tres años han producido más de 150 ideas en diferentes negocios. Peck también agradece la ayuda de la comunidad Bitcoin, ya que comprende su entusiasmo y capacidad para difundir el mensaje.
Presentar recomendaciones de accionistas es un proceso complejo con muchas dificultades, la mayoría de las cuales son propuestas sobre pequeñas cuestiones técnicas, como sobrepasar el límite de palabras o incumplir plazos rigurosos, que las empresas rechazan habitualmente. Pero la experiencia de Peck con estos retos le ha convertido en un gran defensor de la aceptación del Bitcoin por parte de las empresas.
Por qué las grandes empresas dudan en adoptar Bitcoin
La resistencia de empresas como Microsoft y Amazon a adoptar Bitcoin expone un problema cultural y financiero más general. Muchas veces citando riesgos o volatilidad, los grandes gestores de activos y los departamentos de administración de inversiones dudan en promover ideas creativas. Peck describe esta situación como un «momento de bloqueo», similar al de las empresas que pasan por alto las oportunidades que presentan nuevas tecnologías como el streaming o los teléfonos móviles.
Peck mantiene la esperanza en el futuro y ve un momento en el que la América empresarial acoja Bitcoin no sólo por sus ventajas financieras, sino también por su congruencia con políticas monetarias sensatas. «Es un proceso», reconoce. «Podemos tomar impulso, sin embargo, con más exposición y educación»
Hay mucho en juego. Si incluso un pequeño porcentaje del S&P 500 dedicara algunas reservas financieras a Bitcoin, los efectos en cadena podrían remodelar las finanzas corporativas. Para Peck, los principales objetivos son obvios: capacitar a los propietarios, inspirar la creatividad y permitir a las empresas cumplir con sus responsabilidades fiduciarias en un entorno financiero siempre cambiante.