En un panorama criptográfico dominado por grandes actores como Bitcoin y Ethereum, son los recién llegados disruptivos los que suelen generar más revuelo. En esta ocasión, se trata de InQubeta, una plataforma de criptomonedas que combina el poder de la inteligencia artificial y la blockchain, que está causando furor entre los inversores. Por el contrario, MATIC, el token nativo de Polygon, parece alejarse cada vez más de su codiciada marca de 1 dólar. Profundicemos en estos acontecimientos.
MATIC lucha mientras InQubeta sube
Polygon (MATIC) se ha enfrentado a un momento difícil recientemente, ya que sigue a la deriva cada vez más lejos de la marca de 1 dólar. Después de alcanzar un máximo de 2,45 dólares en mayo de 2022, MATIC ha seguido una trayectoria descendente, luchando por encontrar un nivel de soporte estable. Aunque MATIC ha sido una opción atractiva para los desarrolladores que buscan una red de blockchain compatible con Ethereum que ofrezca escalabilidad y bajas tarifas de transacción, su acción de precios pinta una imagen diferente.
El contraste con InQubeta, un recién llegado al espacio criptográfico, es marcado. InQubeta es una plataforma innovadora que democratiza la inversión en start-ups de IA utilizando sus tokens nativos QUBE. Su enfoque ha atraído una atención significativa, mostrando el potencial de crecimiento masivo.
InQubeta: Una plataforma que revoluciona las inversiones en startups de IA
InQubeta tiene la misión de salvar la brecha entre los inversores y las start-ups de IA, creando así un ecosistema de inversión más accesible y democrático. El token QUBE se encuentra en el corazón de este ecosistema, permitiendo la inversión fraccionada en start-ups de IA. Este modelo único de inversión ha generado una respuesta abrumadora por parte de los inversores, y la fase de preventa ha sido testigo de una actividad frenética.
QUBE es un token ERC-20 deflacionario que ofrece a los inversores una oportunidad única de invertir en el potencial de crecimiento de las start-ups tecnológicas de IA. La tokenómica de QUBE, que incluye un impuesto de compra y venta que contribuye a un monedero de quema y un fondo de recompensas, lo convierten en una inversión atractiva.
Además, los titulares de QUBE también pueden obtener recompensas apostando sus tokens. Además, como token de gobernanza, los titulares de QUBE pueden participar activamente en los procesos de toma de decisiones relacionados con el desarrollo, el funcionamiento y la dirección futura de la plataforma.
Potencial de crecimiento de InQubeta
El auge de InQubeta se ve impulsado por el creciente interés y la creencia en el potencial de la tecnología de IA. El modelo único de la empresa permite a los inversores, independientemente de su poder financiero, obtener exposición a este sector. Este enfoque ha convertido a InQubeta en una sensación en el mundo de las criptomonedas, y los analistas predicen un potencial de 100 veces para la plataforma.
El éxito de la fase de preventa, cercana a la marca de los 2 millones de dólares, junto con una sólida hoja de ruta que incluye el lanzamiento de un mercado de NFT, indica un futuro prometedor para la plataforma y sus inversores.
En conclusión, a medida que MATIC se aleja de su antaño codiciada marca de 1 dólar, InQubeta se convierte en el centro de atención. Su enfoque único para democratizar las inversiones en start-ups de IA y el rotundo éxito de su fase de preventa respaldan su potencial para convertirse en un actor importante en el panorama de las criptomonedas. Los inversores están ansiosos por ver si InQubeta está a la altura de su potencial de crecimiento de 100 veces.
Visita la preventa de InQubeta
Únete a las comunidades InQubeta