- Los inversores han seguido financiando prometedoras startups de criptomonedas, incluso mientras los mercados se adentran en el criptoinvierno.
- Estas acciones apuntan a una tendencia alcista a largo plazo, incluso cuando los datos indican una correlación creciente entre los activos digitales y las acciones.
Las empresas emergentes de criptomonedas siguen recibiendo grandes flujos de dinero a pesar de la caída generalizada de los precios desde noviembre del año pasado. Varias de ellas informaron de abundantes inversiones en enero.
Por ejemplo, la bolsa de criptomonedas FTX y su filial estadounidense recaudaron 800 millones de dólares en conjunto, lo que elevó sus valoraciones a 32.000 y 8.000 millones de dólares, respectivamente. La empresa de infraestructuras de criptomonedas Fireblocks está valorada ahora en 8.000 millones de dólares tras una ronda de financiación de 550 millones de dólares. Su rival Blockdaemon obtuvo 155 millones de dólares, lo que la valora en 1.300 millones. Las negociaciones para estos acuerdos de financiación probablemente comenzaron a finales del año pasado.
Las criptomonedas caen, pero la financiación se intensifica
En general, las startups de cripto y blockchain recaudaron un récord de 25.000 millones de dólares en todo 2021, según datos de CB Insights. Esto representa un crecimiento de ocho veces desde los 3.100 millones de dólares del año anterior. También representa un mayor interés en el espacio de las criptomonedas por parte de los capitalistas de riesgo, especialmente desde que los activos digitales tuvieron un éxito de ventas en 2021.
Sin embargo, una fuerte venta en los últimos días ha aumentado la cautela en el mercado. El rey de las criptomonedas, Bitcoin (BTC), se desplomó hasta los 33.000 dólares en enero, después de haber alcanzado un máximo histórico de 69.000 dólares en noviembre. BTC también cerró el mes con una caída de más del 18%, el peor comienzo de año desde 2018. Estos eventos han dibujado la narrativa del criptoinvierno entre analistas e inversores. La última vez que ocurrió un evento de este tipo fue entre finales de 2017 y principios de 2018, cuando Bitcoin se desplomó hasta un 80 por ciento desde su máximo histórico de entonces.
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El CEO de Blockdaemon, Konstantin Richter, dice que si efectivamente el mercado está entrando en un invierno de criptomonedas, entonces será algo sin precedentes. Sin embargo, señala la esperanza que tienen las instituciones en las perspectivas a largo plazo de los activos digitales diciendo,
Muchas instituciones son alcistas a largo plazo en la tecnología.
El paso de la especulación a los casos de uso en el mundo real
La caída de las criptomonedas se ha atribuido, en parte, a las expectativas de subida de los tipos de interés por parte de la Reserva Federal y otros grandes bancos centrales. Estas políticas forman parte de los esfuerzos de estas organizaciones por frenar la inflación inducida por la pandemia. El Bitcoin, famoso por ser el «oro digital», ha sido considerado por muchos como una cobertura contra la inflación. Sin embargo, esta tesis se ha vuelto aún más discutible al ver el aumento de la correlación entre la criptomoneda y las acciones mundiales: estas últimas, y en particular las acciones tecnológicas de alto crecimiento, han recibido un golpe últimamente. Por ejemplo, el Nasdaq Composite ha bajado aproximadamente un 12% desde que alcanzó sus máximos históricos en noviembre.
Pero incluso así, Michael Shaulov, CEO y cofundador de Fireblocks, está convencido de que «la inversión en la infraestructura no va a parar». Razona que el sector de las criptomonedas se está alejando de un enfoque «especulativo», hacia casos de uso más sofisticados.
John Linden, director general y cofundador de la empresa de juegos de criptomoneda Mythical Games, valorada en 1.300 millones de dólares, afirma que un invierno de criptomonedas no sería algo «tan terrible». Añade que ya ha sucedido anteriormente y que ayudó a expulsar proyectos que no tenían valor real. Linden también cree que la caída de los mercados de criptomonedas podría fomentar la innovación en torno a la Web 3.0.
