- Bajo el presidente interino Mark Uyeda, la SEC ha suavizado su postura, abandonando su apelación contra la impugnación de la Asociación Blockchain a la regla de distribuidor ampliada.
- La norma, criticada por regular indirectamente las empresas de comercio de criptomonedas, se considera parte de cambios regulatorios más amplios bajo la administración Trump.
La Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC, por sus siglas en inglés) ha elegido pausar algunos casos legales, comenzando por los que enfrentan plazos inminentes, informó Eleanor Terrett de Fox Business. Este enfoque podría explicar la continuación de los litigios contra Ripple y Kraken, según fuentes citadas por Terrett el 19 de febrero.
Contexto actual de los litigios de la SEC con criptomonedas
Ripple, la empresa detrás de la blockchain XRP Ledger, no enfrenta un plazo judicial hasta el 16 de abril. Por su parte, Kraken tiene un plazo próximo el 31 de marzo, reportó Terrett, como mencionamos en nuestro artículo anterior. Coinbase y Binance, otras dos prominentes plataformas de criptomonedas, tienen plazos legales para el 14 de marzo y 14 de abril, respectivamente.
«Es posible que el liderazgo de la SEC esté esperando que el elegido de Donald Trump para la presidencia, Paul Atkins, esté en camino de ser confirmado para ese momento», dijo Terrett en su publicación en X.
Señaló además:
«El grupo de trabajo sobre criptomonedas, el Congreso y el Grupo de Trabajo Presidencial sobre Activos Digitales están trabajando presumiblemente para llenar los vacíos regulatorios que llevaron a estas demandas en primer lugar.»
Desde 2021, la SEC y la Commodity Futures Trading Commission (CFTC) han llevado a cabo un amplio número de acciones legales contra el sector de las criptomonedas, sumando más de 100 demandas contra empresas de activos digitales por supuestas violaciones regulatorias.
En este contexto, en 2023 la SEC presentó una demanda contra Kraken, acusándola de operar como un agente de valores no registrado. Ese mismo año, Coinbase también fue demandada por supuestamente operar sin el registro adecuado como agente de bolsa, bolsa de valores nacional o agencia de compensación.
Ambas compañías han sido previamente investigadas por la SEC por ofrecer servicios de staking de criptomonedas a clientes en Estados Unidos, lo cual, según el regulador, constituye ofertas de valores no registradas. Asimismo, Ripple ha estado envuelta en un litigio con la SEC desde 2020, acusada de violar las leyes de valores al vender XRP como un valor no registrado.
Recientemente, la SEC ha mostrado una actitud más conciliadora hacia la industria de los activos digitales. Bajo la presidencia interina de Mark Uyeda, la SEC desistió de su apelación en un caso presentado por la Asociación Blockchain y la Crypto Freedom Alliance of Texas, que impugnaba la ampliación de la normativa sobre distribuidores de la agencia. Como se ha señalado, existe un optimismo creciente de que, con esta nueva dirección, el caso contra Ripple podría resolverse pronto. Terrett añadió:
«La regla habría ampliado la definición de un distribuidor para incluir empresas de comercio de alta frecuencia y ciertos fondos de cobertura de criptomonedas, entre otros. El sector la consideró una forma indirecta de regular las empresas de criptocomercio.»
Nuevas políticas bajo el liderazgo interino de la SEC
Con un cambio en la administración, las acciones punitivas contra las empresas de criptomonedas parecen estar disminuyendo. Donald Trump, quien está en su segundo mandato como presidente de Estados Unidos, ha manifestado una postura favorable hacia las criptomonedas. Su administración ha prometido reducir la regulación y establecer a Estados Unidos como «la capital criptográfica del mundo». Como parte de esta política, Trump ha nominado a Paul Atkins, ex comisionado de la SEC, como director de la agencia.
Desde que Trump asumió su segundo mandato el 20 de enero de 2025, se ha observado una reversión en las medidas regulatorias contra las empresas de criptomonedas. Por ejemplo, Kraken restableció su servicio de staking para usuarios estadounidenses el 30 de enero, después de haberlo suspendido anteriormente debido a la presión regulatoria de la SEC.