- Pekín ha pedido a sus homólogos estadounidenses que suavicen los aranceles a la importación y los controles a la exportación en un intento de reforzar el comercio entre las dos superpotencias.
- Se espera que el presidente chino, Xi Jinping, y el ruso, Vladimir Putin, falten a la Cumbre del G20 que se celebrará en Nueva Delhi la próxima semana, mientras el movimiento BRICS sigue expandiéndose.
La relación entre Estados Unidos y la República Popular China se ha intensificado en los últimos años, como demuestran las interacciones comerciales entre ambas naciones. Según el embajador de China en Estados Unidos, Xie Feng, los aranceles y los controles a la exportación estadounidenses son los culpables del continuo declive del comercio entre ambos países.
Además, Feng señaló que el comercio entre China y EE.UU. cayó alrededor de un 14,5% durante la primera mitad del año en 2023, en comparación con el mismo periodo del año anterior. Destacó Feng:
Esto es consecuencia directa de las medidas de EE. UU. de imponer aranceles de la Sección 301 a las importaciones chinas, abusar de las sanciones unilaterales y endurecer aún más los controles a la exportación. El sustento de muchas familias se ha visto afectado y las empresas de ambos países se han llevado la peor parte.
La revelación se produce después de que funcionarios chinos siguieran pidiendo una mayor cooperación entre Estados Unidos y China para mejorar el comercio entre ambos países. Por ejemplo, Wang Wentao, Ministro de Comercio chino, pidió a sus homólogos estadounidenses que trabajaran para superar sus diferencias en beneficio de la comunidad empresarial mundial.
Además, se espera que el PIB chino se ralentice en 2023, pasando del 10% de los últimos años a alrededor del 5,1%. En particular, el sector chino de la construcción, que contribuye en más de un 20% a su PIB, se ha visto perjudicado desde el cierre de Covid-19. Por ejemplo, la constructora china Evergrande se enfrenta a una deuda de más de 328.000 millones de dólares y a unas 2.000 demandas de acreedores.
¿Puede China buscar ayuda para el crecimiento en otros lugares?
En los últimos años, China ha acelerado sus compras de crudo y sus interacciones con el movimiento BRICS. A principios del mes pasado, Jinping viajó a Sudáfrica para asistir a la cumbre de los BRICS, en la que se dieron a conocer seis miembros más. Curiosamente, los nuevos miembros del BRICS son grandes productores de petróleo encabezados por Arabia Saudí, Irán, Emiratos Árabes Unidos, Egipto, Etiopía y Argentina.
A medida que la relación comercial entre Estados Unidos y China empeora, China ha aumentado su financiación de la investigación local en industrias cruciales como la de los chips semiconductores para garantizar su futura independencia.
China ya ha impuesto restricciones a la exportación de materias primas utilizadas en la fabricación de chips semiconductores en medio de la exageración mundial sobre la inteligencia artificial (IA). Por otro lado, Estados Unidos ha sancionado a las empresas tecnológicas chinas para que no accedan a sus productos de chips semiconductores, lo que ha devastado el crecimiento económico del país.
El lugar de Ripple en la disputa entre EE. UU. y China
Ripple Labs desempeña un papel crucial en los pagos transfronterizos a través de diferentes corredores a través de su XRP. Con el dólar estadounidense, que es la reserva monetaria mundial dominante, sintiendo el calor de la desdolarización, se espera que Ripple se beneficie significativamente a medida que las empresas adopten su tecnología para facilitar los pagos transfronterizos.