- El dólar estadounidense está amenazado mientras los BRICS buscan una moneda alternativa.
- Se rumorea que Bitcoin podría ser una de ellas, ya que cumple todos los requisitos para el comercio internacional.
El dólar estadounidense ha sido la principal moneda de reserva del mundo durante más de 60 años. Sin embargo, su dominio se ve amenazado en la actualidad por la alianza BRICS, formada originalmente por Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica, que trabaja en la búsqueda de alternativas.
En la reciente cumbre de Sudáfrica, nuevos países miembros como Arabia Saudí, Irán, Etiopía, Egipto, Argentina y Emiratos Árabes Unidos se unieron a la organización, haciendo que la alianza sea más fuerte y popular. Antes de su reciente cumbre, se informó de que otros 40 países habían mostrado interés por la organización.
La decisión de dejar de lado al dólar estadounidense se debe al uso de la divisa como herramienta para imponer sanciones, de las que Rusia es la última víctima. En una reunión reciente, el Presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva propuso la idea de crear una moneda única de los BRICS para las transacciones entre los Estados miembros. Aunque no se está realizando ningún esfuerzo serio para introducir la moneda de los BRICS, algunos expertos creen que la creación de una moneda única es inminente.
Es importante señalar que el papel del dólar estadounidense como principal moneda de reserva mundial certifica la autoridad de liderazgo de Estados Unidos. Esto implica que la desdolarización afectaría a su acceso al capital, aumentaría los costes de los préstamos, bajaría los valores bursátiles, etc.
Qué ocurrirá cuando los BRICS derroquen al USD
A lo largo de los años, el dólar se ha utilizado como moneda de pago preferente de una de las materias primas más dominantes en el comercio mundial: el petróleo. La dolarización otorga a Estados Unidos el poder de tomar decisiones financieras internacionales y obliga a la comunidad mundial a adaptarse. Una repercusión importante de la desdolarización es que países como Irán y Rusia podrían quedar inmunes a las sanciones, con las débiles implicaciones que ello tendría para la economía estadounidense.
Una vez que los BRICS derroquen con éxito al dólar estadounidense, su demanda sería sin duda menor y podría abaratar las exportaciones. En este caso, la confianza en su estabilidad podría verse muy afectada. A largo plazo, se produciría un aumento de los tipos de interés que afectaría al mercado bursátil y dificultaría la obtención de préstamos. Otra situación que debería preocupar a EE. UU. es que economías considerables como Indonesia y Turquía quedaron fuera de los países admitidos este año. El movimiento cuenta actualmente con los seis principales productores de petróleo del mundo: Arabia Saudí, Rusia, China, Brasil, Irán y Emiratos Árabes Unidos. Por ahora, hay poca información sobre los criterios concretos de admisión.
Tras la decisión de establecer una moneda común, han surgido rumores de que los BRICS podrían considerar Bitcoin para el comercio debido a su conveniencia. Bitcoin existe como un sistema financiero revolucionado con un tiempo de liquidación rápido, tasas de transacción más bajas, un alto nivel de seguridad, transparencia, comodidad y fácil acceso. La decisión de adoptar Bitcoin podría suponer la entrada de miles de millones de dólares en el mercado y podría preparar el precio para otra carrera alcista.
Al cierre de esta edición, Bitcoin cotizaba a 26.238,49 dólares. En los últimos siete días, el activo ha caído un 3,5%.