- IOTA ha adoptado estratégicamente los grafos acíclicos dirigidos (Directed Acyclic Graphs, DAG) como componente fundamental en su misión de hacer posible la autonomía digital para todos.
- La adopción de DAG en la arquitectura Tangle de IOTA ofrece numerosas ventajas, como el procesamiento paralelo y en flujo, la eliminación de intermediarios y un mecanismo de consenso distribuido.
En el panorama en constante evolución de la tecnología blockchain, los grafos acíclicos dirigidos (DAG) han surgido como un elemento fundamental, e IOTA ha estado a la vanguardia de su implementación.
IOTA señala que la elección de DAG fue una estrategia deliberada arraigada en la misión de IOTA de permitir la autonomía digital para todos.
Por qué DAG frente a Prueba de Trabajo
En los primeros días de la era de la tecnología de libro mayor distribuido (DLT), Bitcoin introdujo un enfoque sencillo pero eficaz para el mantenimiento del libro mayor. Su mecanismo pionero, conocido como Prueba de Trabajo (PoW), amalgamaba ingeniosamente el mecanismo de consenso -que dicta qué datos obtienen entrada en el libro mayor compartido- con el módulo de acceso. Así, PoW controla quién posee el privilegio de publicar en la red. Además, PoW se basaba en la extracción de bloques nuevos, fusionando estos elementos fundamentales en una única dinámica.
Sin embargo, aunque la simplicidad de PoW llamó la atención, también expuso ciertas vulnerabilidades. Este diseño fomenta una competencia feroz entre los usuarios que compiten para que sus transacciones se incluyan en el libro mayor, lo que conduce inevitablemente a un aumento de las tarifas durante los periodos de mayor actividad de la red.
La transición de Prueba de Trabajo a Prueba de Participación
Estas limitaciones de la tecnología blockchain llevaron a la Fundación IOTA a explorar soluciones eficaces y mejores. La innovación más destacable surgió en forma de blockchains de Prueba de Participación (PoS), diseñadas para obviar el trabajo computacional intensivo en recursos. Los sistemas PoS obligan a los usuarios a bloquear sus tokens como garantía -staking de sus tokens- para participar en una lotería de minería de bloques. Aunque PoS resuelve los problemas relacionados con el consumo de energía, no consigue mitigar los problemas fundamentales inherentes a blockchain:
- El procesamiento secuencial: Las blockchains de PoS siguen necesitando procesar los bloques en secuencia, lo que lleva a períodos de inactividad inútiles para los validadores que no están utilizando activamente su hardware.
- Dependencia de los validadores: Los usuarios siguen dependiendo de los validadores para difundir sus transacciones en la red, lo que crea problemas relacionados con las comisiones y la extracción de valor.
🌐 An obvious choice: We adopted a #DAG architecture to overcome the limitations of blockchain technology. Read our latest blog post to understand how a DAGs’ collaborative approach aligns with #IOTA 2.0 objective of #DigitalAutonomy For Everyone. 🔗https://t.co/gCczOa3tgJ pic.twitter.com/PGsLjnsXlC
— IOTA (@iota) November 8, 2023
Para IOTA, la aspiración trasciende la mera participación en el ámbito de blockchain; el objetivo es sentar las bases de la economía Web 3.0, promoviendo la autonomía digital y cultivando un ecosistema autosostenible. Como resultado, IOTA se embarcó en el desarrollo de Tangle, una arquitectura de datos distinta enraizada en la estructura DAG. Este marco innovador permite soluciones más imaginativas y mejora significativamente la eficacia de IOTA en la realización de su visión.
Ventajas del DAG
El diseño único de la red Tangle permite la aprobación de bloques no lineales, formando un grafo acíclico dirigido (DAG). La adopción de DAG aborda numerosos cuellos de botella que históricamente han impedido que las blockchains convencionales logren una escalabilidad significativa. IOTA aprovecha las ventajas inherentes de DAG para mitigar estos problemas:
- Procesamiento paralelo: Los bloques se pueden procesar simultáneamente, lo que reduce el tiempo de inactividad y aumenta la eficiencia computacional.
- Procesamiento en flujo: La validación continua optimiza el uso de hardware y acelera las confirmaciones.
- Sin intermediarios: Los usuarios de IOTA pueden crear sus propios bloques y transacciones sin minería ni intermediarios, mejorando la eficiencia y preservando el valor de los activos.
- Consenso distribuido: DAG permite un sistema de validación más inclusivo, involucrando a todos los usuarios en la construcción del consenso y recompensando la participación activa.
La decisión de construir sobre una estructura DAG no fue arbitraria, sino más bien un imperativo estratégico para IOTA. DAG se alinea con la misión de IOTA de empoderar a la comunidad, otorgar autonomía a los usuarios y posicionarse como la piedra angular de la futura economía digital.