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La preventa de InQubeta (QUBE) ha incentivado a los primeros inversores a participar en su preventa con aumentos de precio en cada una de las diez fases del evento. Los inversores que participaron en la fase beta pueden aumentar su capital en un 400%, mientras que los que se unan a la acción pueden multiplicarlo por tres.

La apertura de la preventa de InQubeta a inversores de todo el mundo evita que unos pocos monopolicen la oferta de tokens, como ocurre con Worldcoin (WLD). Sólo 10 carteras contienen el 98% del suministro de tokens de Worldcoin, lo que podría crear un mercado desequilibrado propenso a la manipulación.

InQubeta se centra en abrir oportunidades para invertir en inteligencia artificial (IA) sustituyendo las acciones por tokens no fungibles (NFT) basados en acciones en su blockchain. Crea una alternativa de fácil acceso a los canales de inversión convencionales y sus requisitos, a menudo elitistas. Al facilitar la inversión en IA, InQubeta contribuye a impulsar el avance de la tecnología.

InQubeta (QUBE) permite a los primeros inversores multiplicar por 4 sus fondos antes de que los tokens se lancen a las bolsas

El potencial de aumentar las inversiones hasta un 400% ha sido sin duda uno de los factores que han impulsado a los inversores a la preventa de QUBE, pero eso no es todo lo que la red tiene a su favor. El hecho de que InQubeta facilite el acceso a las inversiones en IA es una solución muy necesaria en el ámbito de la inversión, ya que más del 90% de la población mundial no cumple los requisitos para participar a través de los canales tradicionales. Por ejemplo, los ángeles inversores de Estados Unidos tienen que demostrar que han ganado más de 200.000 dólares durante al menos dos años consecutivos para acceder a oportunidades de inversión.

La IA va camino de convertirse en la próxima gran revolución tecnológica y creará oportunidades para que los inversores obtengan beneficios exponenciales. Las personas a las que se les ha negado la entrada en los medios de inversión tradicionales tienen ahora una alternativa que no les exige superar obstáculos.

La preventa de InQubeta no podría ser más oportuna, ya que las inversiones en IA crecen exponencialmente y las proyecciones indican que pronto se destinarán más de 1,5 billones de dólares a empresas que hacen avanzar la inteligencia artificial.

Una alternativa mejor

Los inversores no tienen que cumplir ningún requisito ridículo para invertir en IA en la red InQubeta, pero las startups que necesitan financiación tienen que ser autorizadas por el equipo de operaciones antes de obtener acceso a su mercado de tokens no fungibles.

Estas startups obtienen capital vendiendo NFT basados en capital, que son la forma blockchain de las acciones. Aumentan de valor a medida que sus creadores hacen crecer sus operaciones, preparando a los inversores para obtener enormes beneficios si alguna vez se convierten en actores principales de la revolución de la inteligencia artificial.

Una vez cerradas las operaciones, los inversores obtienen el control total de sus NFT, lo que les permite conservarlas a largo plazo o venderlas cuando lo deseen.

los tokens $QUBE alimentan la red InQubeta y se utilizan para todas las transacciones del mercado. La oferta de estos tokens está limitada a 1.500 millones, mientras que los impuestos sobre la red reducen aún más la oferta. El pequeño suministro de tokens y la infravaloración actual de $QUBE dan al proyecto InQubeta tanto potencial de crecimiento como Bitcoin (BTC), el rey de las criptomonedas.

los tokens $QUBE pueden stakearse para obtener beneficios y también dan a los inversores un voto en las decisiones que afectan a las operaciones o al desarrollo futuro del ecosistema.

Los precios de Worldcoin (WLD) se hunden

Worldcoin fue cofundada por el CEO de OpenAI, Sam Altman, y dirige un proyecto digital descentralizado. Al igual que InQubeta, es una blockchain basada en Ethereum que goza de su funcionalidad, seguridad y transparencia. Los datos de Etherscan muestran que sólo 10 direcciones de cartera controlan alrededor del 98% de los 10.000 millones de tokens disponibles.

Los dos primeros monederos, que contienen el 52,5% de todos los tokens, pertenecen a la red y están destinados a ser puestos en circulación. Las siete direcciones siguientes también están vinculadas a la Fundación Worldcoin, por lo que es poco probable que el monopolio de los tokens cause problemas a largo plazo, ya que la mayoría se pondrá sistemáticamente en circulación.

Resumen

InQubeta ofrece a los primeros inversores la oportunidad de aumentar el valor de su inversión 4x durante su preventa y mucho más una vez que los tokens coticen en bolsa. El proyecto tiene todo lo que necesita para el éxito a largo plazo, como las útiles soluciones que proporciona, su excelente economía de tokens y el creciente interés de los inversores en la IA.

Visite la preventa de InQubeta

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John Kiguru es un editor consumado con una gran afinidad por todo lo relacionado con blockchain y criptomonedas. Aprovechando su experiencia editorial, aporta claridad y coherencia a temas complejos dentro de la esfera de la tecnología descentralizada. Con un enfoque meticuloso, John refina y mejora el contenido, asegurando que cada pieza resuene con la audiencia. John es licenciado en Empresariales, Gestión, Marketing y Servicios de Apoyo Relacionados por la Universidad de Nairobi. Su formación académica enriquece su capacidad para comprender y comunicar conceptos complejos en el ámbito de la cadena de bloques y las criptomonedas.

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