- Dominik Schiener, fundador de IOTA, ha denunciado la lentitud de la adopción de blockchain en la UE.
- Los expertos advierten de que la UE puede quedarse rezagada si sus políticas sobre criptomonedas no cambian pronto.
El desarrollo de criptomonedas en Europa genera discusiones. El cofundador de IOTA, Dominik Schiener, expresó en X su desacuerdo con la propuesta del euro digital del Banco Central Europeo (BCE). Schiener manifestó su inquietud por la falta de adopción de blockchain por parte del BCE, considerando que esta decisión podría afectar la posición de Europa en el desarrollo tecnológico global.
Las stablecoins impulsan el avance digital del dólar
Estados Unidos avanza en el desarrollo de stablecoins, las criptos vinculadas al dólar. El presidente Donald Trump busca expandir estas criptomonedas a escala internacional. Trump emitió una Orden Ejecutiva para promover las stablecoins como parte de su estrategia en criptomonedas. Piero Cipollone, miembro del BCE, indicó que esta medida podría atraer usuarios de la banca europea.
Esta situación llevó a solicitar al BCE la creación del euro digital para mantener su competitividad. El euro digital se define como una moneda digital del Banco Central (CBDC), que permitiría transacciones sin requerir una cuenta bancaria.
Esta iniciativa busca facilitar el acceso a servicios financieros para personas sin vínculos bancarios tradicionales. El sistema operaría bajo la gestión de empresas privadas, sin utilizar blockchain. Los bancos expresan preocupación por la posible pérdida de clientes si estos optan por carteras digitales respaldadas por el BCE.
El euro digital enfrenta cuestionamientos
Schiener manifestó su descontento con el enfoque europeo. En su publicación, expresó que Europa evita el uso de blockchain en el desarrollo del euro digital. Señaló que Europa necesita priorizar blockchain e Inteligencia Artificial (IA) para mantener su competitividad. El cofundador de IOTA advirtió sobre el riesgo de rezago frente a Estados Unidos y Asia, regiones que atraen talento y empresas tecnológicas.

Como ya comentamos anteriormente, la política alemana Joana Cotar cuestionó los beneficios del euro digital. Propuso que Europa considere monedas digitales descentralizadas como Bitcoin (BTC), enfatizando la importancia de tecnologías que brinden autonomía financiera. Nigeria, Jamaica y Bahamas implementan sus monedas digitales. El BCE espera la autorización de legisladores para proceder con el euro digital.
Los señalamientos de Schiener reflejan el descontento por la lenta incorporación tecnológica en Europa. Las empresas tecnológicas y desarrolladores de blockchain migran a regiones con regulaciones más flexibles. Los analistas indican que Europa debe decidir entre adoptar nuevas tecnologías o perder competitividad. El desarrollo de la moneda digital europea continúa en fase de evaluación. Los especialistas indican que las decisiones actuales determinarán la posición futura de la UE en el entorno digital.