- El Tesoro australiano planea regular el sector de los activos digitales con arreglo a la legislación financiera vigente para equilibrar la innovación, la gestión de riesgos y la protección del consumidor.
- El marco impondrá normas que garanticen que los DAP protegen los activos de los usuarios, al tiempo que establecerá nuevas normas para el canje de SVF como las stablecoins.
El Gobierno australiano, liderado por el Partido Laborista de centro-izquierda, ha presentado un plan de cuatro pilares para regular los activos digitales. Este enfoque incluye normas de gobernanza, licencias para proveedores de servicios, leyes de custodia y regulaciones específicas para stablecoins con requisitos mínimos de capital. El objetivo es integrar los activos digitales en el marco financiero existente, asegurando la protección del consumidor y la integridad del mercado.
La estrategia regulatoria de Australia toma elementos de la normativa de la Unión Europea sobre mercados de criptoactivos (MiCA) y del marco transparente e innovador de Singapur.
MiCA busca armonizar las regulaciones entre los países de la UE, garantizando la protección del consumidor, la integridad del mercado y el cumplimiento de las normas contra el lavado de dinero. Por su parte, el modelo de Singapur es reconocido por su claridad y apoyo a la innovación, sirviendo como referencia para otros países.
Elementos clave de la propuesta regulatoria
El Departamento del Tesoro de Australia presentó el 21 de marzo una serie de medidas regulatorias clave para fortalecer la supervisión del sector de criptomonedas. Las exchanges de criptomonedas, los proveedores de custodia y ciertas empresas de corretaje deberán obtener una Licencia Australiana de Servicios Financieros (AFSL). Además, estas entidades deberán cumplir con normas estrictas, como la protección de los activos de los clientes y el mantenimiento de reservas mínimas de capital para garantizar la estabilidad financiera.
Aunque el nuevo marco regulatorio se enfoca principalmente en las grandes plataformas de criptomonedas, las empresas más pequeñas y las startups que no alcancen ciertos umbrales de tamaño, así como las empresas que desarrollen software relacionado con blockchain o activos digitales no financieros, estarán exentas de estas regulaciones.
Las stablecoins, criptomonedas vinculadas a activos tradicionales, serán clasificadas dentro de las reformas gubernamentales para la concesión de licencias de pagos. Sin embargo, algunas stablecoins y tokens envueltos podrán beneficiarse de exenciones según sus características, lo que refleja un enfoque equilibrado que reconoce las particularidades de las finanzas digitales.
La desbancarización, que ocurre cuando las instituciones financieras tradicionales retiran servicios a empresas relacionadas con criptomonedas, ha sido una preocupación constante, ya que podría llevar a estas operaciones a espacios no regulados. Reconociendo este riesgo, el gobierno de Albanese se ha comprometido a trabajar con los cuatro principales bancos de Australia para comprender mejor el problema y desarrollar soluciones que mitiguen el impacto de la desbancarización en la industria.
Caroline Bowler, consejera delegada de BTC Markets, calificó las reformas como «sensatas» y destacó su papel en mantener la competitividad de Australia a nivel global. Sin embargo, pidió claridad sobre los requisitos de capital y custodia para evitar que estas normas limiten la inversión empresarial.
Jonathon Miller, director general de Kraken Australia, subrayó la necesidad urgente de una legislación específica para criptomonedas que elimine las ambigüedades actuales. Según él, un marco regulatorio claro, junto con soluciones a la desbancarización, podría impulsar el crecimiento de la economía australiana.
A medida que Australia se acerca a sus elecciones federales, con encuestas que indican una carrera ajustada entre el Partido Laborista del Primer Ministro Anthony Albanese y la Coalición opositora, el futuro de estas iniciativas regulatorias podría depender del resultado electoral. La Coalición también ha expresado su intención de priorizar la regulación de criptomonedas si resulta elegida, lo que sugiere que este tema seguirá siendo relevante independientemente del partido en el poder.