- Una encuesta reciente ha revelado que la Generación Z prefiere cada vez más las criptomonedas a los planes de jubilación tradicionales, como los 401(k).
- A pesar de que el 83% de los inversores que conocen las criptomonedas las consideran una inversión de riesgo, cada vez son más los que optan por asignar fondos a activos digitales.
Un estudio reciente realizado por Todd Dupeyan, vicepresidente senior de investigación de mercado de YouGov, analizó más de 10,000 encuestas realizadas a lo largo de 2024, destacando una clara división generacional en las preferencias de inversión entre los estadounidenses. Los resultados muestran que la Generación Z es casi cuatro veces más propensa a invertir en criptomonedas, con un 42% de su cartera destinado a activos digitales, en comparación con solo un 11% en cuentas de jubilación tradicionales.
Esta tendencia refleja un cambio en la mentalidad de los jóvenes inversores, quienes priorizan oportunidades de alto crecimiento y de naturaleza digital sobre estrategias de ahorro a largo plazo más convencionales. Aunque el 49,9% de los inversores de la Generación Z considera invertir en criptomonedas, su puntuación de crecimiento sigue siendo relativamente baja (7,0 puntos), lo que sugiere que podrían estar explorando otras clases de activos para diversificar sus carteras.
El estudio también evaluó la satisfacción del cliente en 23 grandes firmas de inversión, incluyendo Fidelity, BlackRock iShares, JPMorgan Chase, Charles Schwab y Goldman Sachs. Mientras que los Millennials muestran una preferencia por las criptomonedas (36% frente al 34% en cuentas de jubilación), las generaciones mayores, como la Generación X y los Baby Boomers, continúan priorizando opciones tradicionales como los planes 401(k), acciones y cuentas de ahorro.
La opción de inversión más arriesgada pero más popular
A pesar de su creciente popularidad entre los inversores más jóvenes, el 83% de quienes están familiarizados con las criptomonedas las consideran una inversión de alto riesgo, posicionándolas como la clase de activos más volátil. Otras inversiones percibidas como riesgosas incluyen opciones y futuros, acciones, objetos de colección y materias primas, lo que refleja una preocupación generalizada por la volatilidad del mercado.
En contraste, solo el 6% de los inversores considera que los certificados de depósito (CD) son riesgosos, consolidándolos como una opción segura y estable. La Generación Z, en particular, está recurriendo cada vez más a las plataformas de criptomonedas, con un 48% utilizando estos exchanges como su principal canal de inversión. Otras opciones, como plataformas de inversión en línea (14%), cuentas de jubilación y ETFs (13%), y plataformas inmobiliarias (10%), tienen una adopción menor.
Es destacable que solo el 9% de los inversores de la Generación Z no utiliza ningún canal de inversión, lo que indica que este grupo sigue alejado de los mercados financieros tradicionales y digitales. Estas tendencias sugieren que la Generación Z valora la accesibilidad, la flexibilidad y el potencial de alto rendimiento sobre la estabilidad a largo plazo asociada con las cuentas de jubilación.
¿Por qué la Generación Z elige las criptomonedas?
Muchos jóvenes inversores desconfían del sistema financiero tradicional, al que consideran obsoleto, lento y diseñado para beneficiar a las instituciones en lugar de a las personas. En lugar de depender de planes 401(k), que requieren décadas de contribuciones y crecimiento compuesto, la Generación Z se siente atraída por el potencial de las criptomonedas para generar ganancias significativas en el corto plazo.
Plataformas como TikTok, X (antes Twitter) y Reddit han influido en esta tendencia, moldeando las perspectivas financieras de los jóvenes y fomentando estrategias de inversión más audaces. Además, factores como la inflación, la deuda estudiantil y la inestabilidad laboral han aumentado el escepticismo hacia los ahorros tradicionales para la jubilación, impulsando a los jóvenes hacia alternativas de inversión.
Un factor adicional que ha impulsado esta tendencia es el apoyo del presidente Donald Trump a las criptomonedas. Desde sus campañas de 2024, Trump ha abogado por la innovación en el espacio de los activos digitales, promoviendo regulaciones más claras que podrían ofrecer un entorno de inversión más estable. Su postura ha contribuido a legitimar las criptomonedas, acelerando su adopción entre las generaciones más jóvenes.